El gran viaje


William Stephens Smith

William Stephens Smith:
el más constante de los amigos norteamericanos de Miranda, le prestará su ayuda en París en 1800 y colaborará en su tentativa de fomentar una rebelión independentista en Venezuela en 1806

Imagen:
U.S. Marshals Service

Visto ya como peligroso por España, Miranda parte de Londres junto al coronel Smith el 13 de agosto de 1785 para asistir a las legendarias maniobras del ejército prusiano bajo el mando de Federico II. Sin saberlo, al decidir viajar a Prusia por Holanda en lugar de a través de Francia, el oficial fugitivo evita caer en una trampa que le ha sido tendida por Floridablanca en ese país.


Los dos amigos observan las maniobras en Potsdam en septiembre de 1785 y luego viajan hasta Viena, donde Smith deja a Miranda para regresar a Londres a asumir sus funciones oficiales. A partir de entonces y durante los próximos cuatro años, Miranda recorrerá la mayor parte del continente europeo, viajando en solitario o en la compañía sucesiva de varios sirvientes, de los cuales uno, el sueco Andrés Fröhberg, se ganará su afecto. La mayor parte del tiempo subsiste gracias a préstamos que recibe y a la hospitalidad que le es acordada en atención a cartas de presentación que solicita y obtiene sin dificultad de numerosas personas.


El periplo, casi ciertamente el primero hecho por un sudamericano por tales latitudes, le permite observar con sentido crítico los modos de vida de los diversos pueblos que encuentra desde el Asia Menor hasta Escandinavia. También lee afanosamente sobre una gran variedad de temas, y consigue entrevistarse con algunas de las principales figuras políticas, intelectuales, artísticas y científicas de su tiempo, evitando a veces revelarles su verdadera identidad para no señalar su posición a los agentes de Madrid.


Deslice el cursor de su ratón sobre los nombres de los países para descubrir algunos de los hechos principales de este gran viaje.


Sus variadísimas anotaciones sobre la vida en la Europa de entonces son parte esencial de su Archivo, reconocido en 2007 por la UNESCO como Patrimonio Documental de la Humanidad (ver Legado).